Con independencia del sector o la modalidad de negocio en la que decidas emprender, siempre tendrás que enfrentarte a algunas gestiones burocráticas para su puesta en marcha. Es lo que sucede con las licencias de apertura en España, un requisito extensible a prácticamente cualquier negocio que emplee un espacio físico para el desarrollo de su actividad.
La tramitación de este tipo de permisos puede resultar un poco abrumadora al principio, pero solo es cuestión de seguir un orden, ajustarse a unos plazos y cumplir con unos sencillos requisitos previos.
En este artículo entenderás qué es la licencia de apertura y cómo obtenerla para poner en marcha tu negocio de forma legal.
¿Qué es una licencia de apertura?
De forma muy general, se podría decir que existen dos tipos de negocios: los físicos y los online. Desde el punto de vista de los procedimientos para su puesta en marcha, los trámites son prácticamente los mismos (altas en Hacienda y Seguridad Social, constitución de la empresa, número de identificación fiscal, registros…), salvo por la obligatoriedad de la licencia de apertura.
Este documento acreditativo únicamente es necesario cuando la actividad comercial, ya sea de venta o de servicio, se realiza desde un local específicamente destinado para tal fin.
Es un documento oficial expedido por los ayuntamientos y certifica que tus instalaciones cumplen con las normativas vigentes y reúnen todos los requisitos para operar de manera segura.
Así pues, lo que diferencia a la licencia de apertura de otros trámites necesarios para la puesta en marcha de un negocio es el concepto de localización. ¿Qué quiere decir esto?
Que si decides montar un negocio 100 % online desde casa, no necesitarás tramitar esta certificación, pero sí realizar otros trámites obligatorios, como la comunicación del inicio de tu actividad comercial a Hacienda y a la Seguridad Social.
Validez y revocación de las licencias de apertura
Una vez que obtengas la licencia de apertura para tu negocio, no tendrás que volver a preocuparte de este trámite. Esta certificación no tiene fecha de caducidad, sin embargo, sí tendrás que solicitar su renovación si se dan alguna de estas circunstancias:
- Cambio en el tipo de actividad que se está desarrollando en el local.
- Modificaciones o reformas que afectan a la estructura del local, su distribución o el total de la superficie útil.
- Paralización de la actividad del local por un plazo superior a 6 meses.
- Cambio en las condiciones con las que se otorgó la licencia inicialmente.
También puede darse el caso de que desde la Administración se decida la revocación de la licencia de apertura de tu negocio por alguno de estos motivos:
- No comunicar cambios sustanciales en el tipo de actividad que se desarrolla en el negocio o en las condiciones del local (por ejemplo, una reforma importante).
- Incumplimiento de las obligaciones específicas de la licencia otorgada, como accesibilidad, seguridad o gestión medioambiental.
- Detección de infracciones y riesgos relacionados con la actividad que se está desarrollando en el local.
En cualquier caso, si el Ayuntamiento te envía una notificación de revocación, dispondrás de un plazo de gracia para presentar pruebas que demuestren que es una decisión improcedente, o recurrirla ante un órgano superior.
¿Qué negocios necesitan licencia de apertura en España?
Con carácter general, la obtención de una licencia de apertura es obligatoria para todas las actividades comerciales que vayan a desarrollarse en un local comercial abierto al público.
Este trámite es un modo de certificar oficialmente que las instalaciones se ajustan a las exigencias urbanísticas, medioambientales, higiénicas y técnicas para el desarrollo seguro de una determinada actividad.
Obviamente, no todas las actividades son iguales ni conllevan los mismos riesgos, por lo que la obtención de esta certificación no siempre resulta igual de compleja o costosa, e incluso hay casos en los que ni tan siquiera es obligatoria.
Tras las últimas actualizaciones en materia legal, la obligatoriedad de una licencia de apertura en España en 2025 ha quedado relegada a las denominadas “actividades calificadas”.
Bajo este epígrafe se agrupan todos aquellos negocios que, por su propia naturaleza, pueden resultar insalubres, nocivos o peligrosos. Son, por lo general, actividades del ámbito de la hostelería, la construcción, el ocio nocturno, las instalaciones industriales y los servicios sanitarios.
Actividades que ya no necesitan una licencia de apertura
Desde hace ya algunos años, el panorama legal es muy distinto para las empresas españolas que se dedican a “actividades inocuas”.
Pertenecen a este segundo grupo de clasificación todas las actividades comerciales que no suponen un riesgo o una molestia para el entorno. Piensa, por ejemplo, en negocios como un pequeño supermercado, una tienda de ropa y complementos o una floristería.
Conforme a la Ley Crea y Crece de 2022, la tramitación de la licencia de apertura ya no es obligatoria para este tipo de actividades. Se pretende, de esta forma, fomentar la creación de pequeños negocios minoristas y simplificar los trámites para su creación.
Entre las excepciones contempladas por la Ley destacan:
- Negocios minoristas con actividades inocuas y una superficie no superior a los 300 m2 (la licencia de apertura se sustituye por una Declaración de responsabilidad, sin perjuicio de una eventual comprobación por parte de la Administración.
- Actividades empresariales localizadas en domicilios particulares, sin perjuicio de obtener la autorización de la comunidad de vecinos (como la fabricación de joyas o productos de artesanía).
- Actividades desarrolladas en el ámbito doméstico que no dan lugar a la generación de ingresos comerciales (por ejemplo, clases de apoyo escolar).
- Actividades de voluntariado desarrolladas por organizaciones sin ánimo de lucro.
- Actividades eventuales o temporales, sin perjuicio de obtener el permiso necesario para la realización de un determinado evento (por ejemplo, la organización de una boda o un cumpleaños).
¿Cómo afectan las licencias de apertura al ecommerce?
En principio, la puesta en marcha de un negocio online también estaría exenta de la obligatoriedad de una licencia de apertura. Pero existen algunos matices en esta afirmación.
Imagina que gestionas tu tienda online desde unas oficinas en las que, además de un espacio de trabajo para tus empleados o para atender a las visitas y a los proveedores, dispones también de un almacén para tu inventario.
Aun tratándose de una de las denominadas “actividades inocuas”, es posible que en este caso sí estés obligado a la obtención de una licencia de apertura.
La ley únicamente exime de este requisito a las actividades inocuas que se desarrollan en locales de menos de 300 m2. Además, las comunidades autónomas y, por extensión, las administraciones locales, pueden introducir variaciones en esta tipología de negocios.
En consecuencia, aunque dos instalaciones y actividades comerciales reúnan las mismas características, la licencia de apertura puede ser obligatoria en ciertas regiones de España y no en otras.
Para evitar problemas, lo más recomendable es que lo consultes directamente con el Ayuntamiento del municipio desde el que deseas operar.

¿Cómo se tramita una licencia de apertura? Guía paso a paso
El otorgamiento de una licencia de apertura es un trámite que depende de los ayuntamientos, por lo que pueden existir ligeras diferencias entre municipios. No obstante, lo habitual es que el procedimiento se realice siguiendo pasos similares y presentando una serie de documentos comunes en cualquier tramitación.
También hay que tener en cuenta que la solicitud de una licencia de apertura puede realizarse de dos formas:
Solicitud de licencia ordinaria
Es el procedimiento habitual que deben seguir todos los negocios dentro de la categoría de “actividades calificadas”. Estos son los pasos y la documentación necesarias para tramitar la solicitud:
- Redacción de un proyecto técnico: con toda la información referente al inmueble: superficie, ubicación, distribución, accesos, medidas antiincendios, insonorización, etc.
- Abono de tasas: se dividen en dos tipos, las tasas del Colegio Oficial que ha redactado el proyecto técnico (aparejador, arquitecto, ingeniero) y las tasas municipales, que varían de un Ayuntamiento a otro.
- Presentación telemática o presencial de la documentación: se entrega al organismo municipal competente toda la información relacionada con el proyecto técnico, la actividad del negocio y la persona interesada en obtener la licencia. Algunos ayuntamientos facilitan los trámites online.
- Inspección y emisión de la licencia: una vez que un técnico analiza toda la información y visita el local para hacer las comprobaciones necesarias, recibirás tu licencia de apertura y podrás iniciar tu actividad de manera legal.
En estos casos, no es posible comenzar la actividad en el local hasta que el Ayuntamiento no haya emitido la licencia de apertura correspondiente. Además, es recomendable (y en algunos casos, obligatorio) exponer este certificado en un lugar visible del establecimiento para dejar constancia de que este está autorizado para su funcionamiento.
Solicitud por procedimiento simplificado
Es un trámite mucho más sencillo que permite a los negocios iniciar su actividad con solo presentar una Declaración responsable. Como ya se indicaba en un apartado anterior, solo pueden acogerse a este procedimiento los negocios que se dediquen a actividades inocuas. En este documento se incluye información básica como:
- Datos personales del titular del local: DNI, nombre, apellidos, información de contacto.
- Datos del establecimiento: dirección, referencia catastral, superficie útil, distribución.
- Datos de la actividad: clasificación y tipología de la actividad, operaciones, particularidades.
- Declaración de cumplimiento normativo: comunicación del cumplimiento de las normas y requisitos exigidos para el desarrollo legal de la actividad.
- Documentación adicional: otros documentos que la persona interesada considere relevantes para respaldar su declaración, como la memoria técnica del local o los planos.
La particularidad de este procedimiento, también conocido como licencia exprés, es que el Ayuntamiento no otorga ninguna licencia ordinaria, pero se reserva el derecho de hacer las comprobaciones pertinentes en el establecimiento en cualquier momento.
La solicitud por procedimiento simplificado también se emplea para la tramitación de otras intervenciones como pequeñas reformas, colocación de carteles o modificación parcial en el uso del local.
Consecuencias de operar sin una licencia de apertura
La falta de comunicación del inicio de la actividad mediante una Declaración responsable (actividades inocuas) o la inexistencia de una licencia de apertura (actividades calificadas), puede derivar en cuantiosas sanciones económicas.
Dependiendo de la gravedad de la infracción y de la normativa municipal, las multas pueden ir desde los 30.000 hasta los 600.000 euros, y acarrear el cierre temporal o definitivo del negocio.
Da el salto a los negocios online
Disponer de una tienda física puede ser el primer paso para iniciar un negocio de ecommerce exitoso. Una vez que has cumplido con todos los requisitos para poner en marcha una tienda tradicional, lo tienes mucho más fácil para dar el salto a los negocios por Internet.
Amplía las posibilidades de venta de tu tienda física a través del ecommerce. En Shopify encontrarás numerosas aplicaciones para integrar tus inventarios y gestionar tu negocio físico y online desde una única plataforma.
Preguntas frecuentes sobre la licencia de apertura
¿Qué negocios necesitan una licencia de apertura en España?
Las actividades inocuas que se desarrollan en locales de menos de 300 m² (fruterías, peluquerías, tiendas de ropa, agencias de viajes…) no necesitan disponer de licencia de apertura para empezar a operar: basta con presentar una Declaración responsable. Las actividades calificadas (ocio nocturno, hostelería, servicios médicos…) sí están obligadas a solicitar esta licencia.
¿Cuánto se tarda en obtener una licencia de apertura?
Dependiendo del volumen de trabajo del Ayuntamiento, la complejidad de la información presentada y la cantidad de gestiones necesarias, la tramitación de una licencia de apertura puede demorar entre 6 semanas y varios meses.
¿Qué precio tienen las licencias de apertura en España?
El coste de una licencia de apertura varía en función de las características del local y de la actividad que vayas a realizar en él, así como de las tasas municipales. Las licencias de apertura en España suelen tener un coste de entre 300 y 1.200 euros (pequeñas y medianas empresas).
¿Qué documentos son necesarios para la obtención de una licencia de apertura?
Al tratarse de una competencia municipal, cada Ayuntamiento puede solicitar la documentación que considere pertinente. Por lo general, los documentos básicos para la tramitación son:
- Planos de la ubicación y la distribución del local.
- Información de la actividad que se va a desarrollar en él.
- Licencia de obras (en el caso de que se vayan a realizar reformas para su habilitación).
- Certificación técnica del local que avale el cumplimiento de la normativa vigente.
Todos estos documentos se incluyen en la redacción de un proyecto técnico por parte de un arquitecto, ingeniero o aparejador.
¿Las licencias de apertura tienen fecha de caducidad?
No. A menos que realices cambios sustanciales en la estructura del local o en su uso, no es necesario que renueves tu licencia de apertura. En algunos casos, es posible traspasar la licencia de actividad a un nuevo titular, pero son las administraciones locales las que establecen sus propios requisitos a la hora de autorizar o no estos traspasos.
¿Es necesaria la licencia de apertura para un ecommerce?
Las licencias de apertura son documentos obligatorios para la puesta en marcha de negocios en espacios físicos. Si operas 100 % online desde tu propia casa, no necesitas esta autorización. Pero si gestionas tu ecommerce desde unas oficinas especialmente destinadas a ello, tal vez tengas que tramitar esta autorización. Consulta la ordenanza municipal que te competa para conocer los requisitos aplicables: en algunos casos bastará con presentar una Declaración responsable.